Una cámara de seguridad del Ayuntamiento captó su imagen el día que se le perdió la pista
Isabel del Castillo, de 57 años y enferma de Alzheimer, salió de su casa en la localidad marfileña de Navalcarnero el pasado 19 de agosto y desde entonces su familia la busca sin descanso. Este martes la Guardia Civil ha coordinado una batida masiva por tierra y aire con dos puntos de partida: la última imagen de la desaparecida y el uso pionero de una aplicación que revolucionará este tipo de búsquedas.
El último rastro de la mujer se sitúa en la salida del municipio por el sur, donde una cámara de seguridad del Ayuntamiento captó su imagen con la misma vestimenta y enseres con los que minutos antes, sobre las 20:30 horas, salió de la casa que compartía con su marido, del que no solía separarse, informa Efe.
Según el trazado dibujado por la Guardia Civil, gracias a las pesquisas realizadas durante las más de dos semanas que han transcurrido desde la desaparición, Isabel, días después de volver de un viaje a Grecia, estaba siguiendo un camino que era habitual en su día a día, pero en un punto cercano a la salida 32 de la A-5 pudo despistarse o confundirse a consecuencia de la enfermedad que padece.
Tras descartar que se trate de una desaparición forzosa o voluntaria, los agentes, que ya han rastreado Navalcarnero y otras zonas colindantes, coordinaron este martes un dispositivo de búsqueda en el que participaron casi 250 personas: 120 allegados y voluntarios, agentes forestales, policías locales, voluntarios de Protección Civil y guardias civiles.
La batida se prolongó durante varias horas pero, a pesar de los esfuerzos, no dio sus frutos, por lo que se estudia que se prolongue en otras localizaciones durante los próximos días. La búsqueda es pionera debido al uso de la aplicación móvil Alertcops, que desde el año 2015 funciona como un canal de comunicación entre la ciudadanía, la Policía Nacional y la Guardia Civil.
Este martes ha estrenado su nueva funcionalidad, la coordinación de batidas para encontrar a personas desaparecidas. Los voluntarios se la han descargado en sus móviles para comunicar al puesto de mando cualquier indicio o vestigio de interés. Todos los participantes se han integrado en grupos organizados cuyo coordinador enviaba a tiempo real una señal de posicionamiento a la aplicación.
El dispositivo de búsqueda se ha desplegado en la zona rural hacia la que se dirigía Isabel en la última imagen captada por una cámara de seguridad. Se trata de un área de pasto, caminos y senderos que han batido los casi 250 participantes en la batida por tierra, además de un helicóptero y varios drones, poniendo el foco sobre puntos de difícil acceso como los pozos de la zona.
Para ello se ha contado con efectivos del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) con cámaras sumergibles y del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña (GREIM) de la Guardia Civil, además de unidades caninas. Un amplio dispositivo de que por el momento no ha aportado novedades sobre el paradero de la mujer, que sigue siendo un misterio.