A falta de recibir los últimos informes, la magistrada prevé archivar la causa y rechaza todas las diligencias que había solicitado la defensa de la familia
A pasar de los muchos interrogantes que giraban en torno al crimen de la joven de Alcalá de Henares, Milena Sánchez, en Madrid, y que la familia había denunciado, la jueza que investiga el caso prevé archivar la causa al considerar probado que la chica murió asfixiada a manos de un cliente que luego se suicidó, ya que la joven se anunciaba como scort o acompañante de pago.
En un auto fechado el pasado 6 de febrero, al que ha tenido acceso Efe, la titular del Juzgado de Instrucción número 44 de Madrid rechaza una batería de diligencias que había solicitado la defensa de la familia de Milena y autoriza a levantar el precinto del piso en el que primero fue encontrado el cadáver de Alfonso F.B.A. y dos días después el de la joven, en una habitación cerrada con candado.
La madre de Milena, que ejerce la acusación particular, ha señalado a Efe que «no parará hasta que se esclarezca todo», quiere que la investigación siga para descartar si realmente no hubo más personas implicadas y cómo actuó el presunto autor material de la muerte, un «sugar daddy» de 53 años que tenía en su casa un cuarto para prácticas sexuales.
En su auto reciente la magistrada deja claro que «no existe el más mínimo indicio ni duda razonable» de que Milena falleció el 22 de noviembre de 2022 en el domicilio de Alfonso F. B.A. «por asfixia, cuando se encontraba sola con él en dicha vivienda» y «en el transcurso de la práctica de relaciones sexuales». La magistrada, no obstante, está a la espera de recibir el informe definitivo de la autopsia
La jueza considera innecesarias diligencias como tomar más testimonios y recabar más muestras en el piso del suceso, y rechaza también que se identifique a un hombre que según la acusación habló en redes sociales de la muerte de la joven antes de que se produjera ya que ésto, según la magistrada, «no puede considerarse cierto».
El auto relata cómo la joven de 20 años ejercía de escort en una empresa y también a través de una aplicación, a través de la que quedaba con un cliente conocido como Fofi, de 53 años, y con el que el 22 de noviembre de 2022 Milena quedó para ir unos baños árabes en el centro de la capital y luego a sus piso, en la calle Fray Luis de León.
Allí el hombre tenía una habitación donde llevaba a cabo prácticas sexuales que incluían actos como atar a las jóvenes, asfixiarlas momentáneamente o simular que estaban muertas, según los relatos recabados por la Policía e incluidos en el auto. El día que mató a la joven, el hombre dejó el cuerpo en una habitación, se fue y quedó con otra escort.
A esa otra escort le contó que se quería suicidar debido a sus problemas mentales, según se recoge en el auto. El día 24 se suicidó y su cuerpo fue encontrado el día 26, tras lo que la Policía, que inicialmente no tenía orden judicial para registrar la vivienda, encontró el cuerpo de la joven dentro de una de las habitaciones, cerrada con candado.