Así relatan los testigos lo sucedido
Eran las 2 de la madrugada en el pub Morghan de Alovera, situado en la Avenida Príncipe de Asturias de la localidad.
El local reunía entonces unas 20 personas, trataban de pasárselo bien como una noche más de viernes entre copas, risas y música.
Pero la velada fue interrumpida por un personaje extraño que entró por la puerta. Llevaba la cara tapada por una braga y una capucha, «sólo se le veían los ojos».
Los testigos del suceso, con los que ha podido hablar MiraCorredor.tv, relatan que en ese momento se quedaron todos extrañados. «Cuando lo vimos entrar nos quedamos pensando ¿Éste de qué va?».
El hombre se quedó parado, levantó la mano derecha con el arma y pegó un disparo al techo. En ese momento se desató el pánico. «Cuando escuchamos el primer disparo pensamos que era de fogueo o que era un petardo o algo así, pero nadie se imaginó que era un tiro de verdad».
La gente estaba asustada, comenzó a agacharse y a ocultarse como pudo y las mujeres se dirigieron despavoridas todas al baño.
Uno de los clientes fue el que se dirigió al atracador «cogiéndole de las muñecas». Le sacó del pub, le dejó en la entrada, le sujetó y mientras le agarraba las manos y le quitaba el arma, en el forcejeo, el atracador disparó, y acabó hiriendo en una mano al hombre que sacó coraje para enfrentarse a él y poder reducirlo.
El segundo disparo aterrorizó todavía más a los clientes, nadie sabía qué hacer. Otro chaval salió para ayudar a contenerlo hasta que llegaron la Guardia Civil y la Policía Local.
Después supieron, porque en un principio el presunto atracador no medió palabra, que su intención era entrar a robar. «Él lo que dijo es que iba a robar, pero ya entró disparando».
La Guardia Civil detuvo al hombre de 40 años y abrió una investigación para esclarecer los hechos.
El cliente de 44 años herido, y que responde a las iniciales de J.M.A.G, fue trasladado en una UVI móvil al Hospital de Guadalajara donde el sábado por la mañana fue intervenido en la mano en la que recibió el disparo. Fuentes sanitarias señalaban a este medio que en un principio no revestía gravedad.
Del atracador poco se sabe, los testigos sospechan que se trata de un vecino de Alovera que vive en una casa ocupada.
«Este día nunca lo vamos a olvidar» cuentan algunos de los presentes, sin poder ocultar los nervios al hablar del asunto después del «miedo terrible» que pasaron. «No estamos acostumbrados a que pasen estas cosas aquí en el pueblo».
Un atraco a mano armada en un pub de Alovera deja un herido y un detenido