Un hombre violento y con antecedentes por robo y tentativa de homicidio
Raquel López Airas era una camarera de 45 años que vivía en el número 12 de la calle Dos de Mayo de Alcobendas junto a su marido y su hijo, Malik, de 12 años.
Los cuerpos de ambos fueron encontrados cosidos a cuchilladas en esa misma vivienda, precisamente, este pasado 2 de mayo. Su marido, Markel Malik, de 36 años, los apuñaló a los dos después de una discusión cuyos motivos todavía se desconocen, después llamó a una prima para contarle lo que había hecho y finalmente se dio a la fuga.
Llevaban juntos casi 12 años y según cuentan fuentes de su entorno más cercano en Madrid a MiraCorredor.tv, nunca habían tenido problemas, se les veía bien y ella luchó mucho en su día para poder traérselo a España desde Marruecos. Aquí solo llevaba un mes más o menos, desde que ella le arregló los papeles. Él, de profesión carpintero, pasaba largas temporadas en Francia trabajando en la recogida de fruta.
«Se les veía súper bien, ella luchando moviendo papeles para que él pudiese viajar a España y ella viajaba a Marruecos siempre que podía», cuentan las mismas fuentes.
De hecho, en las redes sociales no daban indicios de que estaban atravesando por problemas, todo era felicidad, ella compartiendo fotos recientes en las que aparece junto a su hijo y en algunos casos salen los tres.
Raquel llegó de Eibar a Madrid para ganarse la vida. Desde el pasado mes de agosto, tenía un bar alquilado con una amiga en San Sebastián de los Reyes, donde no paraba de trabajar.
«Era una mujer fuerte, luchadora, jamás hubiese permitido que él la faltase el respeto», explican a este medio las mismas fuentes.
En Euskadi dejó a su familia, dos hijos más mayores que Malik de una pareja anterior, que, cuando se han enterado de la notica, se han quedado destrozados, sin encontrar una explicación a lo que ha podido pasar.
«No pensábamos jamás que pasara algo así… Mirarlos a la cara mientras los matas… Esa imagen debe atormentarte toda la vida», relatan fuentes de su entorno en Madrid, sin lograr entender lo ocurrido, por más vueltas que le dan, y sin conocer por ahora el paradero del presunto asesino, al que la Policía señala como único sospechoso. Además, cuenta con antecedentes penales de hace años por intento de homicidio y por robo, aunque no había denuncias previas ni orden de alejamiento por violencia de género.
Los pocos que le conocían aseguran que, de puertas para afuera, era una persona «agradable», sin embargo, según algunas voces del entorno de la pareja, Raquel habría confesado a una amiga que desde que Markel Malik llegó a España estaba «muy nervioso», dando muestras de «actitudes violentas». Al parecer, últimamente, «bebía mucho y consumía sustancias».
El Ayuntamiento de Alcobendas ha decretado dos días de luto con banderas a media asta por el doble asesinato, el segundo de una mujer que se produce en la localidad en tan solo dos meses. El pasado 3 de marzo, Mari Paz aparecía muerta en su vivienda con un profundo corte en el cuello.