El trabajador municipal recibió el disparo cuando se encontraba reparando una avería
Un empleado municipal del Ayuntamiento de Azuqueca de Henares (Guadalajara), será intervenido quirúrgicamente para extraerle el perdigón que se le quedó alojado en la pierna la pasada semana tras recibir un disparo desde un edificio mientras se encontraba en plena calle reparando una fuga de agua.
Según adelanta en exclusiva El Heraldo del Henares y recoge MiraCorredor.tv, el operario municipal, de 46 años de edad, ha denunciado ya los hechos ante la Guardia Civil y ante el propio Ayuntamiento, al considerar que sufrió un riesgo físico y que no fue atendido correctamente por la mutua de accidentes Fremap.
Todo sucedió el martes 20 de junio, sobre las 8.20 horas, cuando este trabajador se encontraba levantando la calzada con un martillo neumático para descubrir una avería de agua en el Pasaje de la Ermita de la localidad, momento en el que sintió un fuerte impacto en la nalga derecha.
En ese momento creyó que le habían lanzado una piedra, pero minutos después se dio cuenta de que tenía una mancha de sangre en el pantalón, por lo que fue a la mutua de trabajadores Fremap para que le curaran.
Según ha denunciado, en Fremap le practicaron una cura superficial y no le hicieron radiografía.
Fue en su casa cuando se dio cuenta de que tenía un orificio, volviendo al día siguiente a la mutua donde ya sí le hicieron una radiografía y comprobaron que tenía un perdigón incrustado en su nalga derecha, como se puede ver en la imagen que publicamos a continuación, cedida por El Heraldo del Henares.
El empleado municipal fue derivado al Hospital de Fremap en Majadahonda donde, una semana después, será operado este jueves para poder extraerle el perdigón.
Por este motivo, según el citado diario, los delegados de prevención de riesgos laborales del Ayuntamiento de Azqueca han puesto una queja al Fremap ante la edil de Personal y presidenta del Comité de Seguridad y Salud del Ayuntamiento «por el mal diagnóstico de la lesión y su demora en la solución: No es posible que el trabajador deba tener tanto tiempo el objeto dentro de su cuerpo», señalan.
La Guardia Civil, por su parte, está investigando de dónde procedió el disparo. El trabajador, en su denuncia, sospecha que pudo proceder del bloque que está enfrente de una discoteca del Pasaje de la Ermita, 2, o del edificio de la calle perpendicular, Santiago Ferrer.