
Los detenidos pertenecían a una supuesta organización que traficaba con heroína en diferentes países. En total hay 35 detenidos en la mayor operación policial de la década contra la heroína
Una de las últimas fases de la operación que todavía sigue abierta, se ha desarrollado en la localidad de Meco donde se ha detenido a un ciudadano búlgaro que disponía de un chalet en este municipio. La policía tenía la certeza de que en el interior de esta vivienda se almacenaba una gran cantidad de heroína. Por ello, el pasado 9 de octubre se practicó una entrada y registro en el que se intervinieron 5,2 kg de heroína turca de gran pureza, diversas cantidades de dinero en euros y dólares, además de tres vehículos de gran cilindrada, una pistola con silenciador y un contador de billetes. En el transcurso del registro se arrestaron a otras dos personas de nacionalidad búlgara, dos de las cuales ingresaron en prisión y otra quedó en libertad con cargos.
La investigación dio comienzo en abril de 2015 cuando la Unidad de Investigación de los Mossos en el Baix Penedés detectaron un punto de venta de heroína y cocaína en El Vendrell. Tras seguir los pasos, los agentes detectaron una red de ciudadanos de Guinea-Bissau asentados en Barcelona y Madrid, dirigida por un importante distribuidor a nivel europeo, con contactos y puntos de venta ilegales en España, Portugal, Francia, Italia, Luxemburgo, Noruega, Suecia, Finlandia, Suiza y Rumania. El seguimiento de esta red permitió destapar una de sus vías de suministro tras el hallazgo de 71,6 kilos de heroína en el puerto de Odessa (Ucrania) camuflado en un cargamento de madera al que había llegado por vía marítima desde Pakistán y que iba a ser trasladada a una carpintería de Cubelles (Barcelona).
El valor en el mercado de la droga intervenida supera los seis millones de euros
La otra gran vía de suministro de heroína de la rama guineana de la red detectada en Barcelona provenía de Madrid. Las investigaciones de Mossos, Policía Nacional y Guardia Civil, iniciadas tanto en Barcelona como en Madrid, pusieron la pista sobre un ciudadano turco que ya había sido condenado en España a 16 años por narcotráfico, un histórico conocido por las Fuerzas de Seguridad. Una vez detenido, se comprobó su relación con tres grupos criminales liderados por rumanos, búlgaros y guineanos. En el caso de los rumanos, la cúpula de la organización era dirigida por un destacado narcotraficante, prófugo de la Justicia española, que dirigía la red desde una prisión de Rumanía donde cumple condena.
En total hay 35 detenidos, 25 de ellos han ingresado en prisión. Se han decomisado más de 80.000 kilos de heroína de gran pureza, más de 1.000 kilos de cocaína y 360 gramos de marihuana. Se ha procedido además al bloqueo de las cuentas bancarias de los detenidos y de sus activos patrimoniales. Se ha intervenido más de un millón de euros y todavía quedan detenciones pendientes. El valor de mercado en dosis de la droga intervenida supera los seis millones de euros.