El nuevo contrato de gestión de esta prestación contempla 16,2 millones de horas anuales de atención
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid ha aprobado hoy el nuevo contrato del Servicio de Ayuda a Domicilio (SAD), que implica una inversión histórica en esta prestación al alcanzar los 677 millones de euros. Tal como ha informado el delegado de Políticas Sociales, Familia e Igualdad, José Fernández, se trata de una cifra récord, pues dobla el presupuesto del contrato actual (supone un 51,5 % más) y eleva al SAD como el servicio de mayor importe anual del Consistorio.
«Así, gracias a un esfuerzo económico sin precedentes del Consistorio madrileño y de la Comunidad de Madrid, los usuarios de este recurso recibirán más horas de este acompañamiento profesional que favorece que personas mayores, con discapacidad o con dependencia reconocida puedan seguir residiendo en sus hogares el mayor tiempo posible. De hecho, según la encuesta de satisfacción de 2024, el 89 % de los usuarios afirmaron que cumple este objetivo», han informado desde el Consistorio.
El contrato del SAD autorizado hoy aplicará el nuevo convenio colectivo del sector acordado por sindicatos y patronal en 2024, que contempla la mejora de las condiciones laborales de los trabajadores. Además, el nuevo pliego también recoge el incremento de las intensidades de atención fijadas por real decreto. En consecuencia, se prevén 16,2 millones de horas anuales de atención, un 19 % más que el contrato en vigor. Para dar cobertura a este mayor volumen de horas de asistencia, el Consistorio madrileño reforzará significativamente el personal del servicio, pasando de 9.051 profesionales a 12.087 (un aumento del 33 %).
Dicha plantilla estará compuesta de forma mayoritaria por auxiliares del servicio a domicilio, pero también por psicólogos, terapeutas ocupacionales, fisioterapeutas, podólogos, peluqueros y responsables de coordinación. El nuevo contrato se divide en cuatro lotes, frente a los tres del vigente, con el objetivo de reducir los desplazamientos del personal entre los diferentes domicilios y de fomentar su estabilidad, así como de mejorar la atención que se proporciona a los usuarios. La distribución de esos lotes por distritos es la siguiente:
- Lote 1: Puente de Vallecas, Villa de Vallecas, Vicálvaro, Moratalaz y San Blas-Canillejas.
- Lote 2: Latina, Moncloa-Aravaca, Chamberí, Centro, Salamanca y Retiro.
- Lote 3: Ciudad Lineal, Fuencarral-El Pardo, Tetuán, Hortaleza, Chamartín y Barajas.
- Lote 4: Carabanchel, Usera, Villaverde y Arganzuela.
El nuevo contrato del Servicio de Ayuda a Domicilio comenzará a ejecutarse en el último trimestre de 2025 y tendrá una vigencia de dos años, con posibilidad de prórroga de 12 meses adicionales. Su aprobación ha sido posible «gracias al trabajo conjunto y leal del Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid», que han alcanzado un acuerdo que implica «aumentar significativamente las aportaciones de ambas administraciones para suplir la infrafinanciación del Estado en la competencia que le corresponde de sufragar la atención a personas dependientes», han señalado las mismas fuentes.
Precisamente, el convenio entre los gobiernos regional y municipal se circunscribe a la financiación del SAD para este perfil concreto de usuarios: personas en situación de dependencia reconocida. Las dos administraciones madrileñas destinarán conjuntamente un total de 228 millones de euros al año a su atención. Los detalles del acuerdo se darán a conocer próximamente. Además, el Ayuntamiento financiará íntegramente el SAD del que se benefician los usuarios asistidos a través de la competencia que sí es propia de la Atención Social Primaria (personas con déficit de autonomía personal, pero sin la tramitación oficial de dependencia). Para ello, aportará otros 110 millones de euros anuales. Todo ello suma el coste que tendrá el Servicio de Ayuda a Domicilio en la ciudad por año: 338 millones de euros.
Nuevas prestaciones
El Servicio de Ayuda a Domicilio se dirige a tres perfiles: personas mayores de 65 años con dificultades en su autonomía personal y con necesidad de apoyo para el desarrollo de sus actividades diarias, personas con discapacidad menores de 65 años y personas declaradas dependientes.
Cada usuario recibe una intervención individualizada que tiene como finalidad promover su independencia, evitar su deterioro estimulando sus capacidades, facilitar su participación en la red vecinal y comunitaria o detectar empeoramientos de salud o situaciones de soledad no deseada. En definitiva, mejorar su calidad de vida mientras residen en sus casas. Para ello, se ofrecen dos tipos de prestaciones. Por un lado, las básicas, que incluyen atención personal (higiene, movilidad dentro del hogar, ayuda en la toma de medicamentos o en la ingesta de alimentos y cuidar a la persona en domicilio) o doméstica (apoyo en la limpieza de la vivienda, compra de alimentos o preparación de comidas). Por otro lado, las prestaciones complementarias en el domicilio, que se conceden previa valoración técnica y que son la psicología, la terapia ocupacional, la fisioterapia, la podología y la peluquería.
Como novedad, el nuevo contrato contempla un programa específico para prevenir la soledad no deseada, una de las prioridades del Ayuntamiento de Madrid. Para ello, se reforzarán los mecanismos de detección, se facilitará apoyo psicológico y se promoverá la participación de la persona con este sentimiento en actividades grupales de interacción social. Asimismo, también como aspecto novedoso, se ofrecerá apoyo a las personas del entorno familiar y personal de los usuarios del SAD que ejercen como sus cuidadores. El Ayuntamiento pondrá a su disposición formación presencial y online, terapia psicológica, asesoramiento en sus tareas de cuidados y una comunidad virtual para la interacción con otros cuidadores.
Según la encuesta de satisfacción del año 2024, el 89 % de los usuarios afirma que el Servicio de Ayuda a Domicilio les permite seguir viviendo en sus casas en mejores condiciones, el 82 % asegura que se siente más seguro y el 81 % sostiene que obtiene el apoyo que necesita. Así, la valoración global que conceden a la prestación es una nota media de 8,4 sobre 10.